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Mostrando las entradas de abril, 2015

Carl Sagan: «Es entendible que Newton creyera en Dios».

«Es fácil entender que algunos de los físicos que se adentraron por primera vez en la realidad de las órbitas coplanarias y que no se cortan de los planetas creyeran distinguir en ellos la mano de un Creador. Estos físicos no podían concebir una hipótesis distinta que explicara una precisión y un orden tan magníficos. Carl Edward Sagan 1934 ─ 1996 Pero según la ciencia moderna, no hay aquí indicios de una dirección divina, o al menos no hay nada que esté más allá de la física y la química. Por el contrario, vemos pruebas de la existencia de una época de violencia despiadada y continua, cuando se destruyeron muchísimos más mundos de los que se conservaron. Hoy en día comprendemos en parte que la exquisita precisión que exhibe ahora el Sistema Solar fue extraída del desorden de una nube interestelar en evolución por la acción de leyes de la Naturaleza que podemos comprender: movimiento, gravitación, dinámica de fluidos y química, y física. La acción continuada de un p

Stephen Hawking, sobre el ajuste fino del universo.

Parece que nuestro universo y sus leyes han sido diseñados con exquisita precisión para permitir nuestra existencia y que, si tenemos que existir, queda poca libertad para su alteración. Esto no es explicable fácilmente y suscita la pregunta natural de porqué las cosas son así. A mucha gente le gustaría que utilizáramos esas coincidencias como evidencia de la obra de Dios.   Stephen Hawking La idea de que el universo fue diseñado para alojar a la humanidad aparece en las teologías y las mitologías desde hace miles de años hasta el presente. En el Popal Vuh de los mayas los dioses proclaman: «No recibiremos gloria ni honor de lo que hemos creado y formado hasta que existan los humanos, dotados de razón». Un texto egipcio típico datado hacia 2000 a. C. dice que «Los hombres, el ganado de Dios, han sido bien proveídos. Él (el dios Sol) hizo el cielo y la tierra para beneficio de ellos». En China, el filósofo taoísta Lieh Yu-Khou expresó la idea mediante un personaje de