Las bacterias constituyen un regalo incalculable para el científico evolutivo. En algunos casos se pueden congelar durante un periodo de tiempo indefinido y después devolverlas a la vida, donde vuelven a reproducirse como si nada hubiera ocurrido. Esto significa que los investigadores pueden crear su propio «registro fósil vivo», como una instantánea del punto exacto que el proceso evolutivo ha alcanzado en un cierto instante. Es justamente esta cualidad de las bacterias (entre otras) la que ha aprovechado el bacteriólogo Richard Lenski y sus colegas de la Universidad Estatal de Michigan en el experimento con Escherichia coli que trataré de explicar de la manera más sencilla posible, para que a modo de introducción les despierte el interés por adentrarse a fondo en este experimento y en otros similares. Los 12 Matraces (6 ara- y 6 ara+) La Escherichia coli es una bacteria común, hay cien billones de ellas en el planeta y unas mil millones se encuentran en nuestro inte
«La vida es sólo un vistazo momentáneo de las maravillas de este asombroso universo. Es triste que tantos la estén malgastando soñando con fantasías espirituales» Carl Sagan.